Alvar Aalto
(1898–1976)
Destacado arquitecto, diseñador y urbanista finlandés, considerado una de las figuras más influyentes del Movimiento Moderno en la arquitectura del siglo XX. Nacido en Kuortane, Finlandia, Aalto dejó un legado que trasciende la arquitectura, abarcando diseño de mobiliario, urbanismo y la búsqueda de una relación armoniosa entre las personas y su entorno construido.
Alvar Aalto y la arquitectura hospitalaria
Aalto realizó importantes contribuciones a la Arquitectura Sanitarista, sobre todo con el Sanatorio Paimio. Construido entre 1929 y 1933 en Paimio, Finlandia, este sanatorio fue diseñado para tratar a pacientes con tuberculosis. El diseño de Aalto se centró en crear un entorno curativo, integrando luz natural, ventilación y vistas serenas del paisaje circundante.
El Sanatorio Paimio es considerado una obra maestra de la arquitectura funcionalista, que enfatiza el bienestar de los pacientes a través de elementos de diseño bien pensados. Aalto incluso diseñó muebles a medida para ser funcionales y estéticamente agradables, como la famosa silla Paimio, para mejorar la comodidad del paciente, picaportes, artefactos de iluminación, sistemas de ventilación y calefacción.
Entorno curativo
La filosofía de Aalto era hacer que el edificio en sí mismo contribuyera al proceso de curación, a menudo refiriéndose a él como un “instrumento médico”.
El sanatorio fue diseñado para promover la rehabilitación y el bienestar, con terrazas para tomar el sol y baños orientados para maximizar la exposición a la luz solar.


Detalles Arquitectónicos
- Diseño General: El edificio tiene una forma en “L”, lo que permite una mejor orientación y exposición al sol para las habitaciones de los pacientes.
- Ventanas: Las ventanas se diseñaron para maximizar la entrada de luz natural. Además, Aalto incluyó ventanas de doble acristalamiento para mejorar la eficiencia energética y el confort térmico.
- Escaleras y Pasillos: Las escaleras principales tienen barandillas y suelos de colores que mejoran la orientación y crean un ambiente más acogedor. Los pasillos se diseñaron anchos para facilitar el movimiento de las camas y equipo médico.
- Terrazas y Balcones: Las terrazas estaban orientadas al sur para maximizar la exposición al sol. Estas áreas también proporcionaban un espacio donde los pacientes podían descansar al aire libre permitiéndoles disfrutar del aire fresco y la naturaleza, lo que se creía que contribuía a su recuperación.
- Techos y Suelos: En las habitaciones de los pacientes, los techos eran de color oscuro para reducir el deslumbramiento, y los suelos tenían colores claros para una limpieza fácil.
- Uso de Materiales: Se utilizaron materiales como el acero y el vidrio para crear un ambiente limpio y moderno. Las superficies eran fáciles de limpiar para mantener la higiene en el hospital.
- Detalles Ergonómicos: Aalto prestó atención a los detalles ergonómicos, diseñando muebles y accesorios específicos para el sanatorio. Por ejemplo, las lámparas de las habitaciones estaban diseñadas para que la luz no molestara a los pacientes acostados en las camas y pensó también en lavabos especiales para reducir el ruido de las salpicaduras.
- Espacios Comunes: El sanatorio incluía amplios espacios comunes, como salas de estar y comedores, que fomentaban la interacción social entre los pacientes y el personal, creando un ambiente más humano y acogedor.
El Sanatorio de Paimio es un excelente ejemplo de cómo la arquitectura puede influir positivamente en la salud y el bienestar de las personas.

